Páginas

domingo, 15 de diciembre de 2013

lo que vale dura, lo que no se pierde.

Creía que en las ciudades llenas era imposible sentirse solo.
Luego aprendí que los sitios grandes también pueden estar vacíos cuando estan a rebosar de gente que ya tienes, pero sigues sin querer sonreír.
Nunca antes había sentido una navidad tan vacía en una ciudad tan llena.
Creía que la felicidad no cabía en los espacios pequeños,pero juro que me conformaría con un par de horas acurracada en ti en el sofá más cutre de todos.
Porque nadie sabía hacer de una noche un mundo, un soplo de aire a la rutina.
Una ilusión diaria que crecía por lo que valía.Pero lo que vale dura, y lo que no se pierde.

Confiar en el mañana es uno de los valores que conlleva a la distancia. Y querer confiar en que volverás, serían verbos bonitos si se hacen de verdad. Era bonito cuando tenía alguien con tanto valor, como el que tenías tú.
 Y digo a mi lado, porque aunque ahora no pueda tocarte, si tropiezo, tampoco me caigo. Por eso quería quedarme contigo, porque sabes sujetarme el mundo cuando se me viene encima, cuando la Navidad venía más gris que blanca.


viernes, 13 de diciembre de 2013

quizás.

Puede que ya no seamos nada, pero hace tiempo fuimos algo.
Para mí, a pesar de lo malo, del vacío que dejabas cuando me dejabas sola tiritándo en pleno agosto, lo fuistes todo, y eso, en cierto modo me tranquiliza.
Ahora sabes quien soy, como soy. Un ogro en ocasiones. Ya sabes que nunca me gustó regalarme los oídos. Soy más de ser defectuosa que una maravilla, ya lo sabes corazón.

Ahora, quizás sepas quienes fuimos, pero no tengas ni puta idea de lo que somos ahora.
Sabes que me encantaba llevarte la contraria y mirarte las espaldas cuando dormías.
Me quedo más tranquila si pienso que ahora cuando me veas, no me echarás de menos, pero te acordarás de las veces que estuve a tu lado, de alguna que otra tarde, y de la sonrisa que nos sacábamos.

Ahora me quedo más tranquila, porque me verás sonreír y puede que te arrepientas de no ser tú el motivo de mi risa.
Y quizás, sólo quizás, te pares a pensar de todo lo que te quise, de lo mucho que pude regalarte y enserñarte, pero que tú a penas me dejastes.

Y quizás, solo quizás, te des cuenta de todo lo que perdimos, o mejor dicho, perdistes tú.

martes, 10 de diciembre de 2013

.

Y cuando todo se acaba, cuanda ya se ha ido, hasta deseas tener lo malo de vuelta, para que así también regrese lo bueno.
El cuento se ha acabado, y el libro se cierra. Ahora toca echar (te) de menos.Quedarme con tus besos, pocos, pero infinitos. Toca decir adiós a algo que quizás que nunca hubiera comenzado hubiera sido lo mejor. De nada sirve pensar que hubiera sido si mi camino no se hubiese cruzado con el tuyo, si de sobra sé que te hubiera buscado aún sabiendo que no te encontraría.
Maldita la hora en que te fuiste, o maldita la hora en que me voy yo. Maldito todos los pretextos que no nos han servido para hacer que esto, o nada, funcionara. Maldita tus ganas de buscarme en otra cama. Y maldita yo por dejar que otro entre donde deberías estar tú.
Quizás ya no vuelva a verte, ni tocarte, ni sentirte como aquella vez, pero siento la necesidad inexplicable de decirte, que yo contigo he sido mucho más feliz de que en los libros se dice que se puede.

lunes, 9 de diciembre de 2013

Sabes que te espero, que es cuestión de esto.

Siempre fue mucho más fácil esperar al sol,que no andar buscando.
Siempre fue mucho más fácil despertar contigo,que no hacerlo sola.
Siempre fue mucho más fácil.

Hoy quizás lo más difíciles saber que todo se fue marchitando.Saber que lo nuestro era, lo nuestro
era mucho más de lo que estoy contando.Hoy es mucho más difícil que nadar sin agua,que volar sin alas,que caer sabiendo que ya estoy sentada. ¿Sabes? Somos dueños, somos vida y somos versos.
Somos como el eco del que tuvo mucho más que besos.Somos los que saben, los que dicen lo que vale,los que inventan los paseos que hoy nos dejan ser honestos.Somos parte de esta historia y para siempre.Somos los que un día lo soñaron, somos vida,somos uno y somos fuertes...mucho más que ayer.
Siempre fue mucho más fácil decir te quiero,que tener que imaginárselo.

Hoy quizás lo que fue nuestro necesite un tiempo para ser perfecto.
Sabes que te espero, que es cuestión de esto,somos mucho más de lo que está pasando.









domingo, 1 de diciembre de 2013

fuiste canción en mis mañanas.

Aún recuerdo la noche en que nos conocimos.La mejor fecha del año créeme. Me acuerdo de cada detalle, de cada palabra, de cada vez que me mirabas,de casa sonrisa, como olvidarla.
No te conocía pero algo dentro de mí me obligaba a hacerlo.
No tarde más de una semana en volver a verte. Para que engañarnos, de saber que no ibas a estar ni siquiera hubiera pensado que te diría la próxima vez te hubiera visto revolver la esquina de la calle en la que deseaba que volvieras aparecer. Llegaste directo y sin portazos, sin avisar, como la primera lluvia del invierno, como una bala directa a la herida,como tus ganas de tocarme y llegarme al corazón. Entonces ocurrió.Te besé, o nos besamos, o no lo recuerdo bien, pero te juro que lo único que recuerdo es que hubiera parado las manillas del reloj en ese momento contad de no volver abrir los labios si los tuyos no estaban cerca.
Hacía frío, lo recuerdo bien,pero encendiste una primavera en mí que aún no ha logrado llevársela el nuevo invierno, ni borrarla otro verano que venía con más fuerza que tú.
Siempre he pensado que hay gente que sabe ser magia aunque nunca llegue a saberlo. Fuiste el mago sin chistera que consiguió que volviera a volar aún teniendo las alas rotas del vuelo anterior. Fuiste barco para un náufrago que llevaba mucho tiempo solo esperando a que alguien lo salvara de su isla. Fuiste la almohada de mis noches y las nuevas ganas de volver a ilusionarme. Fuiste una canción en mis mañanas,fuiste mi canción, la que aún tarareo por las noches cuando me acuerdo de ti.
Fuiste infinito donde antes solo se podía contar hasta tres.
Nunca he dejado la ilusión al otro lado del mundo de despertarme una mañana y verte al otro lado de mi sábana, del paraíso de las noches infinitas que tienen voz y dueño desde que te ví. Y es que te quise y te quiero , aunque estemos destinados no ser.

sábado, 30 de noviembre de 2013

2:18.

Espero no volver a tener que echarte de menos, espero que vuelvas aunque aún no te hayas ido.
Espero que no tardes mucho y que  no me haya dado tiempo a  olvidarme de tí.





" VUELVE, que la vida es  puta y me hace daño si tú no me defiendes."

puedo volar si te miro.

Soñaba con que me dijeras "Estoy aquí para arreglarte la vida, enana". Lo he soñado muchas veces, como si no hubiese otra forma más cruel de recordar que no lo has hecho nunca. Que será a otra a la que le estés quitando las bragas y cuyo nombre gritarás en mitad de los orgasmos. Ya ves que aquí sigo, arañándome, aunque seas tú, estando tan lejos, quien me preste las uñas. Ya pongo yo la excusa, que no he aprendido aún a pasar página conscientemente, sino que releo los errores hasta que no puedo más y me desmayo. Soy el vaso medio vacío de esperanza con expectativas de que lo rellene tu boca. Ven y nos vamos, tengo las maletas hechas para mudarme de toda esta soledad, lo juro. Yo te pago el taxi hasta mi casa, tú sólo sonríe y haz como que soy algo más que la chica de las poesías, que soy la mujer de tu vida,yo que sé, y que no sabías vivir bien hasta que te cogí de la mano. Puedo volar si te miro. Planear por el cielo de tus párpados y luego aterrizar sobre tus labios entreabiertos, que me dicen "entra". Y yo no quiero quedarme fuera. Quiero algo más que nada, algo más que una llamada perdida, una carta tuya cuando llega el cartero. No creo que sea soñarte, sino esperarte desde muy temprano, y mientras llegas yo te imagino llegando con prisas, y al verme aceleras, como sucede en las películas, y como si tardar en abrazarnos un segundo más fuese toda una vida menos. Soñaba con que no me hiciese falta soñarte, y con que me saliesen ojeras por invertir el tiempo para dormir en mirarte. Y también con que despertases y me dijeses aún con los ojos medio cerrados "Estoy aquí para arreglarte la vida, enana". Y yo sería capaz de destrozármela con tal de que te quedases un día más.

será porque el cielo no tiene memoria.

Se me acumulan los portazos. Aún no he aprendido a no llorar con las despedidas. Es que me parece que los finales comienzan siempre algo muy triste: el echar de menos, el medir la distancia que nos parte en dos los corazones. Yo qué sé o hasta cuándo, por las noches miraba las estrellas y era bonito, será porque el cielo no tiene memoria, y no me recordaba a ti. Siempre hay que despertar. Abrir los ojos y no verte. Abrir los ojos y cerrar fuertemente las manos alrededor de todas estas ganas que tengo de que las cosas mejoren algún día. Algún día, cuando deberías ser tú. Y tú, cuando no deberías haber sido nunca. Te prometo que estoy intentando atardecer todos esos días que vivimos. Ojalá el mundo deje de girar.

jueves, 28 de noviembre de 2013

ya no quieren escribirte.

Cansada de dar abrazos vacíos y echar miradas al aire. Ya no te busco en bares vacíos ni camas revueltas,ni siquiera te sueño de noche. Ahora es el corazón el que me pide vacaciones y no la cabeza. Mis pies ya no salen a buscarte porque saben que corren el riesgo de no encontrarte, que hace tiempo que ya no te encuentran. Mi boca ya no grita tu nombre y mis ojos hace tiempo que dejaron de verte conmigo. Mi cuerpo hace siglos que no te siente y días que ya no te echa de menos. Quizás las cosas cambien, o quizás ya estén cambiando, y ahora son mis ganas las que están en otra cama que ni si quiera se parece a tu nombre. Porque quizás no tenga tan claro que ya no te quiera o que mis ganas de hacerlo hayan empezado a descender. Pero si de algo estoy segura, es que mis manos han dejado de ser tuyas, porque ya NO quieren escribirte.

lo hicimos mal, como el invierno con las rosas.

Que podría romperme sin dejar de sonreír. Y también no pedirte que te quedes, aún sin saber cómo seguir si te vas. Podría tropezar a cada paso, estando en el mismo lugar. Y curarme lo suficiente para que sin dejar de doler no me sangren las heridas. Puedo mentirme, pero no creerme. Te diré que todo va bien, pero luego me callaré la tormenta y el naufragio. Me ahorré el cambio de tus gustos por mis manías, y me diré al verte con alguien, simplemente, que no estás conmigo, porque duele más pensar que te están abrazando otros brazos que pensar que no estás con nadie. En qué momento sumar los errores se convirtió en restar la distancia. No sé cómo terminamos siendo distintas esquinas de una misma calle, llena de todas esas veces que no pudimos mirarnos a los ojos. Lo hicimos mal, como el invierno con las rosas. O como las segundas partes que nunca fueron buenas. Y es que cómo acabar cuando aún todo parecía el comienzo. Cómo despedirse en la antesala de un orgasmo. Cómo decir adiós, en lugar de morderte la boca. Es tan difícil retirarse a tiempo de la partida, recoger la ropa antes de que la moje la lluvia, huir de la catástrofe, sobrevivir cuando ya me habías disparado. Es una pena, pero me gustaría que para llegar a la superficie no tuviésemos que tocar antes el fondo, y darnos cuenta entonces de lo lejos que estamos de volver a estar cerca de alguien. Porque en realidad la distancia nunca fue otra cosa que no saber cómo acercarme, ya dolido del contacto, de tantos cuerpos y de todos aquellos portazos, banda sonora de no sé cuántos insomnios. He perdido la cuenta.No me preguntes a dónde voy.

XXVIII.

Tengo miedo de perderte por falta de interés o exceso de ella. Tengo todas las razones del mundo para pedirte que te vayas, y muy pocas para que te quedes a mi lado.Pero no puedo hacerlo,porque necesito sentir que tú también quieres estar conmigo.

martes, 26 de noviembre de 2013

Yo..sí.

Dicen que la energía no se crea ni se destruye, que sólo se transforma. Lo mismo pasa con la tristeza. Podría llover. Alguien debería reconocer que las cosas no van tan bien como decimos. No sé a quién estamos intentando engañar. También dicen que una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. Podría ser, pero no creo que sea tan fácil autoengañarse. Cerrar los ojos no va a evitar el golpe. Ni abriendo el paraguas vamos a salvar al mundo de mojarse. ¿Habéis llorado alguna vez bajo la lluvia?.Yo sí.

lights will guide you home.

No sé si te das cuenta amor, de que cada día que no pasamos juntos es un nuevo mundo en el que nunca sale el sol. La gravedad tiene otra ley, y me sostengo siempre entre la soledad de una cama vacía y el cielo, donde pienso que debes de estar escondido tú. No esperes que te diga "ven", porque me han dejado afónica todas esas veces que se lo dije a alguien y se fue. De la vida no sabré mucho, lo finjo casi todo como hago con la mayoría de las sonrisas, pero intuyo que tendría más sentido si estuvieses aquí. Habré visto demasiadas películas de amor, quizá. También es cierto que nunca terminé de leer Romeo y Julieta porque ya me sabía el final. Aquel suicidio me recuerda a la poca distancia entre nosotros. Los kilómetros, incluso los milímetros que nos seperan saben pegar, y además donde nos duele. Escucha gritar a mis ojos, que también saben necesitarte cuando te ven y no encuentro palabras para pedirte que te quedes. He edificado todo un laberinto con las excusas que he puesto para no volver a intentarnos, y es que me da miedo que seamos de usar y tirar, y que todo lo que siento pueda sentirlo por cualquier otro. No quisiera brillar unos segundos y apagarme, ¿lo entiendes?, ni ser como esa colilla muerta en el cenicero que alguna vez sostuviste en tu boca. Carga el arma y dispara, corazón. Dispárame hasta que te duela también a ti. Te prometo que no voy a gritar, ya estoy acostumbrado al dolor.

haremos el amor entre los escombros.

Cuando dejemos de intentar sobrevivir al domingo, y cuando la lluvia nos moje sin calarnos, y ya la distancia no nos haga daño, y los sueños terminen antes de que despertemos, y no dediquemos insomnios, ni nos abriguemos de las madrugadas, y los inviernos no nos duren toda la vida, y amemos a alguien menos roto, y sepamos qué y cuándo, y la rutina no entre sin llamar a la puerta, ni tengamos la necesidad de ahogarnos menos, y los abismos seamos nosotros y nadie pueda salvarnos, y la herida escueza hasta quedarnos dormidos, y no le busquemos sentido a toda esta mierda, ni una salida, y cuando los atardeceres ya no nos parezcan bonitos, y ningunos labios puedan besarnos poemas, o recorrer nuestro cuerpo en busca de respuestas, y se nos pasen las horas volando, y nosotros andemos sin ir a ninguna parte, y abandonemos a la esperanza antes que ella a nosotros, y las catástrofes nos enamoren menos, y cuando el insomnio sea un recuerdo y las ojeras una fotografía, y los rostros y las sonrisas se nos acumulen, y tirarse en la cama sea nuestra forma de seguir. Cuando pase todo eso, y ya estemos perdidos, ojalá en ese mismo lugar a donde ningún camino conduce haya llegado cualquier otra persona. Hay quien sigue creyendo que para tocar fondo hay que hundirse, pero quizá sólo haga falta no haber encontrado nunca la superficie. Haremos el amor entre los escombros.

Hubieses sido la isla perfecta.

Sólo nos quedaba soñar en aquellas noches, tan frías, o tan solas, tan en las que nosotros nos quedábamos mirando el techo de nuestra habitación, esperando que se hundiese junto a nosotros. Y el tiempo pasando, la madrugada nunca ha dejado de recordar, de morder la herida. Y luego estaban las ojeras. Si hubiese alguna otra forma de salir a tiempo, antes de que el camino se volviese cuesta y nuestras fuerzas fuesen las de otro cuerpo. Si llega el invierno antes que tú, a quién me abrazaré para combatir el frío. O quién evitará la escarcha en mi mirada, la sequedad de mis manos, que ya sólo tocarán el fondo. He sobrevivido hasta hoy, quizá para encontrar una forma más digna de morir mañana, que no sea recordando aquel irreversible retraso que se alargó toda una vida. O eso me parece. Yo te esperaba sin saber si vendrías, o si de venir, si irías a parar a alguna otra parte; a cualquier otra boca. A salvar las ruinas con otro nombre, que también necesitarían la calidez de tus labios. Vivir ha sido siempre un verbo relacionado con necesitar. Y necesitar siempre me ha recordado a ti. Y tú, bueno, siempre me has recordado a las ventanas en los días de lluvia, donde las gotas se estrellaban y descendían. Yo nunca supe bailar bajo la lluvia, y siempre le temí a las tormentas. Debí haberme atrevido a naufragar contra tus brazos. Hubieses sido la isla perfecta.

viernes, 22 de noviembre de 2013

HACER ISLAS OTRAS MANOS.

Yo es que me enamoré de ti antes de saber que eras una estampida. Una tormenta debastadora que tras una sonrisa bonita, ocultaba una catástrofe inevitable.No sé que podía hacer para escapar de ti, así que me acercaba cada vez más.Pensaba que si iba a morir de todas formas,lo haría después de tocar el cielo o el infierno de tu boca. Todo sucedió según lo previsto. Asolastes los esquemas de mi vida y al cuarto mes, me tenías de rodillas a tus pies, no sé si implorando que acabases el trabajo sucio o pidiéndote una segunda oportunidad, y no para arreglar las cosas, si no para volver a tener algo contigo. Cualquier cosa. Si tenía que resucitar, que fuese para que volvieses a matarme corazón. El amor me impedía ver las cosas con claridad, asique era como si siempre estuviera lloviendo en mis ojos. Yo sólo te veía a ti mojándote en la calle y te juro que me dolía no ahogarme a tu lado. Siempre he deseado naufragar en el cuerpo de alguien, y hacer islas otras manos, en las que sobrevivir consistiese en abrazarse, y la necesidad se redujiera a un beso de buenas noches, o al sexo después del desayuno. Te juro que lo he intentado con todas mis fuerzas, no ser tan desastre, ni enamorarme siempre de las personas rotas, porque yo no sé arreglar las vidas de otros que te dijeron "ven" y luego no estaban. Debería dejarme de inventos y suposiciones,la fe en los finales felices la perdí al comienzo, lleno de baches, en el que no supistes abrochar mi sujetador a tiempo, antes de que te buscaras a otra a la que invitar a tabaco, y que no sólo comprendiera TUS sueños, si no que además los compartiera contigo. Te juro que lagún día aprenderé a caminar mirando al frente, sin que me dispare el hecho de encontrarme igual de sola que ayer, pero con menos tiempo para encontrarte.

domingo, 17 de noviembre de 2013

Y mientras yo te hago el amor, tú me vas haciendo poeta.

Mareos,como en una montaña rusa cuando te veo.Como si el mundo girara frenéticamente alrededor de ti. A veces sonríes y parece que es la primera vez que veo sonreír a alguien. El amor nos hace esclavos, y no sé si hay otra forma de amor, pero tampoco me importa. Átame, encarcélame en tus brazos,aliméntame quedándote siempre un poco más. No te vayas, que si te vas creo que yo no sabría quedarme.No, no te vayas. Sigue haciendo paraísos los domingos, fiestas de madrugadas y after al abrazarte por la espalda. Que quiero besarte hasta los centímetros de piel que no tienes, y pasear por la ciudad mientras todos se mueren de envidia porque no tienen la certeza de saber que tienes 8 lunares en la espalda y cafeína en los ojos. Que tu risa huele a victoria, que hueles a vida nueva, como si toda la mierda y los errores de años atrás no existieran cuando estoy contigo. Despertar a tu lado es bonito, porque la realidad se parece a un sueño demasiado perfecto. Y mientras yo te hago el amor, tú me vas haciendo poeta. No creo que exista mayor orgasmo que saber que estarás hay cuando despierte, cuando vuelva a casa. Yo no sé si existen los finales felices, pero me conformo con saber que existen historias a tu lado.

sábado, 16 de noviembre de 2013

Que mis manos siguen siendo tuyas porque siguen escribiéndote.

Ya no recuerdo aquel paraíso que era cuando me tocaban  tus manos, ni de aquellas noches en las que aún no éramos lo que somos, pero ¿ qué somos?. Supongo que nada.
Porque me sé de memoria los músculos de la cara que mueves cuando sonríes, pero ni puta idea de por quién lo estás moviendo ahora.
Nos encontramos buscando algo, ya sabes, tú que alguien te quiera como quieres tú, y yo alguien que llegue a mi vida para que me haga bricolage emocional y me cure el corazón. Que mejor que tú.
Lo hicimos lo mejor que pudimos supongo, pero de todas formas nunca dejó de estar mal. Como iban a sosternerse dos ruinas si en cada abrazo buscábamos el equilibrio de alguien que ya nos dejó. O por lo menos yo..
Ahora tengo las manos llenas de nadie a quién abrazar, de abrazos llenos para alguien como tú, o mejor dicho de abrazos llenos para ti.
Ni siquiera quedan dos besos de despedidas, ni portazos, ni camas medio vacías, porque nunca entrastes en el paraíso de mis sábanas.

Me sé de memoria los pasos que NO recorreré para pedirte que vuelvas quién sabe a donde, orgullo supongo, o por que sé que nunca volveré a sentir tu cuerpo pegado al mío  como en las noches , pocas, que pasé contigo.

Que venga otro,pienso, que aún me queda vértigo en el corazón para volver a enamorarme, y sufrir..ya he sufrido los suficiente por amores de temporada, pero siempre podría hacerlo un poco más. Porque ya no me queda otra cosa que lo poco que han dejado. Un montón de recuerdo firmados, algunos por tí, ausencia de aquellas personas que se fueron sin que llegasen a estar alguna vez del todo, como tú.

Porque yo de la vida no sabré una mierda, y puede que del amor sólo sepa un poco más, pero sé que no quiero que aparezca otro que no seas tú. Por que he soñado tantas veces que me dices " estoy aquí para arreglarte la vida" , que no me hago a la idea de que eso no sea verdad. Lo he soñado muchas veces,como si no hubiese otra forma más cruel de recordar que nunca lo has hecho, o de tener viva la esperanza de que pronto lo harás.


sábado, 9 de noviembre de 2013

you cant see me...



 ...like i can see you.

No sé si me buscas, o soy yo la que intenta encontrarte.

viernes, 8 de noviembre de 2013

yo mataré monstruos por ti.

El tiempo lo cura todo. Otra mentira. El tiempo no cura nada. O cura lo que ya no importa. El tiempo es precisamente lo que nos hiere. 

Noches en vela. Apatía. Distracciones constantes. Pensar en lo que se dijo, en lo que se va a decir. En lo que se debería haber dicho. Mirar el horóscopo. El tuyo y el de él. Idealizarlo. Ver su rostro en cada rostro. Euforia. Bajones. Hablar sola. No comer. Beber en exceso. Vigilar el teléfono. Autocompadecerse. Hablar de tonterías. Írsete la bola. Pensar en lo que él pensaría. En qué estará haciendo. Con quién. Llorar. Oír canciones tristes. Pensar en no pensar. Pensar en pensar en no pensar. No dormir. No vivir. Eso es lo normal en el desamor. 

Aunque, en realidad, fue mucho peor. Mucho. Una profundidad peor. 

Porque era el miedo.

Yo mataré monstruos por ti.

d.g.

"Te quise a pesar de saber que te iba a perder.
Que cada día te perdía un poquito más, y yo seguía en el intento de llenarte el alma."

.


scars.

No hay cicatriz, por brutal que parezca,
que no encierre belleza.
Una historia puntual se cuenta en ella,
algún dolor. Pero también su fin.
Las cicatrices, pues, son las costuras
de la memoria,
un remate imperfecto que nos sana
dañándonos. La forma
que el tiempo encuentra
de que nunca olvidemos las heridas.

miércoles, 6 de noviembre de 2013

tiempo.

Yo quería un punto y final después de nuestro paréntesis.

Creía que lo tenía muy claro y que era imposible que me hicieras cambiar de opinión. Que me hubiera gustado gustarte como te gustan sus ojos. O conseguir temblarte por dentro como te tiembla el mundo cuando ella pasea su cintura por ahí.

A lo mejor no soy capaz de descolocarte tanto el presente, porque quizás las cosas fáciles tienen menos encanto a la hora de jugar.

Pero tú ya jugaste conmigo y me dejaste en mitad de febrero sin buenas noches. 
Ahora no me ilusiono, aunque he de admitir que tenemos dos corazones descosidos a medida. Que sigues teniendo ese nosequé que hace que confíe en ti noseporqué y noséporcuántotiempo.

Pero también me di cuenta de que eras pretéritamente imperfecto, como el verbo besar en la primera persona del plural.

Que también tienes historias de contrabandos y amores diferidos. Pero que amanecer contigo es pretéritamente perfecto, como la lluvia que golpea tu coche mientras nos besamos borrosos, pero conscientes.

Que después de un paréntesis, escribir otro párrafo, también es bonito.
Que el tiempo es el que pasa y el que sabe, y a veces, también el que decide.

F

la verdadera despedida es el olvido

No creo en las despedidas, mucho menos en esos dos besos que se dan dos personas que han estado haciendo el amor durante tanto tiempo.
¿De verdad creéis que cuando dos personas se han querido hasta reventar el corazón, cuando se dan dos besos para decirse hasta nunca no sienten nada?.
No, lo siento pero por ahí no paso.
Creo que la verdadera despedida es el olvido, que un "adiós para toda la vida" es sólo un drama.
Las despedidas serán verdaderas solamente cuando ambas personas no sientan nada la una por la otra.
Sinceramente, yo también he dicho millones de veces adiós, pero las veces que he dicho adiós son las mismas veces que he llorado después al decirlo.

martes, 5 de noviembre de 2013

El amor nos salva.

Me gustaba recién levantado, cuando tenía el pelo despeinado y no sonreía porque tenía sueño.
Me gustaba cuando se levantaba con olor a tabaco y alcohol de la noche anterior. Me gustaba hasta cuando se quejaba de que quería dormir solo sin abrazos, y me tocaba mirarle de espaldas.
No le he visto llorar, pero he visto silencios por otra que no era yo y eso me quemaba por dentro.
Podía ser otoño algunas tardes, y otras tanta primaveras. Verano cuando lo abrazaba e invierno cuando lo veía marcharse y rompía todas las esquinas de mis huesos.
Por aquel tiempo, sin ser feliz, nunca he estado tan cerca de no estar triste.
Nunca pensé que durariamos demasiado cuando ni siquiera había algo por lo que durar. Eramos personas de paso, trenes vacíos en obras. Una pena que no me hubiese dado cuenta de ello a tiempo.
Me sentía en guerra cuando lo veía aparecer, pero la paz llegaba cuando me quitaba la ropa. Nos deseabamos hasta morderno la lengua.
Ahora me quedo sin aire cuando grito que vuelvas, pero nunca vuelves.

El amor nos salva sabes, la cuestión es aprender a sobrevivir decentemente cuando se marcha dando un portazo.

viernes, 4 de octubre de 2013

donde se nace para amar y no para morir.

Ojalá existiera ese lugar que muchos buscan y pocos encuentran, donde el tiempo no pasa, donde los celos no existen, donde el amor se aferra. Ese lugar donde el alma vive siempre, donde jamás se envejece, donde las palabras se quedan y el miedo no importa. El lugar donde los amigos te ayudan y las familia te apoya, donde la hora no importa, y el lugar mucho menos, donde te encuentro llorando y sé confortarte. Donde el rencor no cabe,donde la vida te pone en mi camino pero jamás te quita, donde te espero y llegas, donde te hablo y contestas, donde te beso y me besas. Ese lugar donde nuestros caminos se juntan y no se separan, donde la quietud reina, y las peleas son pretextos para terminar abrazados, donde un te amo es sagrado, pero una caricia lo es más. Ese lugar donde nací para estar contigo y tú para estar a mi lado, donde se nace para amar y no para morir.

jueves, 3 de octubre de 2013

vuelve que la vida es puta y me hace daño si tú no me defiendes.

Creo que he soñado contigo,y estoy segura de que no he despertado a tu lado. Creo que en el sueño te gustaba, como le gusta a noviembre este tiempo tan no saber si mañana lloverá o hará 30 y tantos grados.
Éramos felices,
como las películas sin anuncios, y cuando sonreías yo te miraba y no sé qué hacías, pero por dentro me sentía infinito..
                         ¿era sólo un sueño o algo más?
Era el deseo de despertar y alargar el brazo y tocarte el pecho. El deseo de besarte fuerte el amanecer.
Ni puedo ni quiero pedirle más que eso a la vida. 
Ojalá vuelvas otro díao noche o después de comer,en la siesta,y me hagas vivir más con los ojos cerrados de lo que vivo pisando este mundoque giratan loco con los ojos abiertos.
 
 
 

viernes, 20 de septiembre de 2013

.

Y debo decir que creo plenamente en la casualidad  de haberte conocido. Que nunca intentaré olvidarte, y que si lo hiciera no lo conseguiría. Que me encanta mirarte y que te hago mío con solo verte de lejos. Que adoror tus lunares y que tu pecho me parece el paraíso. Que no fuiste el amor de mi vida, ni de mis días, ni de mis noches, pero te quise y te quiero aunque estemos destinados a no ser.

jueves, 12 de septiembre de 2013

2o poemas de amor y una canción desesperada.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: «La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos.»

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.

Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.
     
                                     Poema XX. Pablo Neruda.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

No sé cuántos cigarros llevo desde que dejé de fumar, o cuántos insomnios me has provocado desde que no pienso en ti. Cuántas canciones ha reproducido el silencio, dónde empieza la distancia y dónde el orgullo.
 No sé cuántas maletas he hecho, para terminar quedándome tirada en la cama, esperando que vinieses de madrugada  y me dijeses que es hora de ir a París.

"Sigo sangrando todo tipo de esperanzas, ya lo ves. "

A veces cierro los ojos. A veces miro las estrellas, son como eras tú, cuando estabas: brillan entre tanta oscuridad. 
 Y es eso, que aunque sé que existen los finales, siempre he ignorado cómo tenerlos en cuenta.
 Me abrazo las rodillas con fuerza, es la única forma; la única que tengo de sentir que sigo siendo de carne y hueso porque algunas noches me siento más bien como si fuese el humo que sale de tu boca al fumar. 
Hay demasiadas colillas amontonadas y apagadas en el cenicero, y cada vez que las miro pienso:  

"Esto es todo lo que nos queda". CENIZAS.

Algo se ha quemado, creo que he sido yo. Creo que es demasiado tarde para llegar a tiempo a cualquier parte, y es que hace mucho que sólo deseo llegar a tus brazos.
 Ya no puedo llorar. Ya no recuerdo cómo era eso de no querer salir corriendo. Salir corriendo pero de mí. De mí... 

jueves, 5 de septiembre de 2013

nuestra guerra mundial.

Me cansé de esperar pero te sigo esperando, y es entonces cuando odio que la esperanza sea la última en abandonarnos.
Me sé de memoria todas tus excusas, todas aquella que ponías para mí. No vendrás y yo me quedaré en casa con la cama a medio hacer, y el paquete de tabaco medio vacío.
Aborrezco esa parte de mí que es más tuya que mía, además de que sea la parte más bonita que tenga. Mira que había precipicios en el mundo, y vine a caer en el de tus ojos. Ya no recuerdo cuantos lunares tienes en la espalda: ¿5,4,3,2,1?, es como una cuenta atrás que no termina en nada
Creo que tienes 7, el número de la suerte para aquella que te los esté contando ahora.
Si cierro los ojos aún puedo verte de espaldas, sentado en aquel bar. No sé a que jugabamos mientras hacíamos como si fuesemos a querernos, o por lo menos yo. Ahora comprendo que algunos juegos se parecen más a una tercera Guerra Mundial, y que aquella vez eclosionó un mundo en el que nosotros eramos los únicos habitantes. Por mi parte han quedado miles de ruinas, cartas de amor que nunca llegué a mandarte, conversaciones de Whatsap de madrugadas, promesas de " un viaje" que nunca hicimos y recetas para la soledad que han caducado.
No hay tiritas para esas heridas ni suficientes ojos bonitos en el mundo para olvidar que los tuyos, fueron los únicos en mucho tiempo que consiguieron quedarse en mis cicatrices el tiempo suficiente como para ver más alla de lo que yo nunca supe enseñarle a nadie.
No llamastes a la puerta, entrastes directamente, y te sentastes a mi lado en aquel piso que aún me recuerda a ti cuando voy.
Querer no se si me quisites, supongo que no, como tampoco llegarás a quererme un día de estos, pero me salvastes la vida más que nadie, jamás, me había salvado.
Aún me estremezco cuando pienso en aquella gente que dice que olvidar es fácil, como si pasar de hoja de un libro se tratase. No se habrán enamorado de ti como lo he hecho yo, supongo...

domingo, 1 de septiembre de 2013

La ciudad de los sueños.

Y entonces me descubrí mirándome.
Allí estaba yo, en pie, justo enfrente del espejo donde siempre te imaginaba.

Entonces tus formas tenían el sentido perfecto,
al compás que marcaba el movimiento de los velos que cubrían las ventanas.
Como parte de un plan astutamente preparado, te imaginaba siempre allí escondido con la cantidad justa de luz,la suficiente como para que yo, pudiese verte.


Me descubrí mirándome y puse el empeño suficiente para descubrirme al detalle.
Durante unos minutos centré toda la atención en mis ojos, grandes, de tonos melosos,
y fue entonces cuando por primera vez te descubrí en mí.
Allí estabas tú, en cada movimiento, en cada parpadeo.
Sorprendida decidí continuar con la "auto-exploración"
y en cada uno de los pasajes de mi cuerpo pude descubrirte,
en algunos más escondido que en otros, pero en casi todos estabas bien presente.

¿Por qué estaba sucediendo?
¿Por qué prácticamente tú y yo formábamos un solo elemento? ¿Un solo ser?


Quizás te había idealizado tanto que "de a poquito" me fui componiendo contigo
hasta descubrir que yo estaba completamente hecha de pedacitos de ti. 


Fragmento extraído del cuento "La ciudad de los sueños" escrito por Antonio Orozco.

sábado, 31 de agosto de 2013

El amor no es un error.

 " La quiero de regreso tanto que..dejo la puerta sin cerrar, dejo las luces encendidas"

Y que se me rompan las manos si un día vuelvo a escribirte.

Quizás por eso no se quedó conmigo. 

Tal vez porque le dió miedo darse cuenta de que yo podía quererle como él no sabía quererse a si mismo.

A veces me odio a mi misma. Odio esa manía de quererte como una loca, de quererte de esta manera tan sobrenatural. Ya no te espero como antes, pero siempre me quedará esa extraña manía de echarte de menos, que espero que algún día se convierta en echarte de más.

Y que se me rompan las manos si algún día vuelvo a escribirte.Que se me rompa el alma si vuelvo a soñarte, el corazón si vuelvo a quererte  y los labios si vuelvo a besarte.

sábado, 24 de agosto de 2013

"Tic-tac-tic-tac, suena como un disparo."

Porque me voy queriendo quedarme, pero hemos llegado a un punto en el que es marcharme o morir. 

Esperarte o la felicidad, porque en el fondo sé que nunca volverás, si es que algún día ya no lo sé, estuviste. 

Y el reloj empieza a marcar demasiado tarde,sea la hora que sea.
                                   
                                          "Tic-tac-tic-tac,  suena como un disparo." 

Adivina quién muere en estas noches: demasiado frías en invierno, demasiado calurosas en verano, pero siempre demasiado solitarias. Demasiado. 


Y me acostumbro a eso, a mirar las estrellas de madrugada hasta perder todas las nociones que me quedan. Me siento junto a la ventana, me enciendo un cigarro, escucho canciones de amor y tarareo tu nombre hasta que deja de tener sentido.





"Hubiese sido bonito."  O al menos sano que hubiese dejado de tenerlo para siempre, pero no, a la mañana siguiente estoy tan herida en mi propia necesidad de estar contigo, como siempre lo he estado.


Ya sabes, recuerdo que un día te lo dije, que no se me da bien olvidarme de las personas. Y miro tu última conexión en WhatsApp con la esperanza de comprobar que hace días que no te conectas y que aún no has leído las últimas palabras que te escribí.

 Eran falsas esperanzas claro. Falsas, como todo lo demás.
Como todo eso que nos dijimos, o que, haciéndole justicia, fingimos decir con una mano en el corazón y apuñalándonos por la espalda con la otra. 

                                            No supimos hacerlo mejor, supongo. 


Pero ya sabes que no nos culpo, ni a ti ni a mí, simplemente fuimos una desviación en la autopista de la vida. No hay más. Y no habrá menos.

Que se lo lleven todo. Que se lo lleven todo, y que vuelvas tú.

Se me enfría el café esperándote. 
Ya no vienes nunca a desayunar, te despiertas demasiado tarde, y en otra cama. Y nunca llamas. 
Habrás olvidado que un día me dijiste que nunca te irías. Lo habrás olvidado. Alzheimer sentimental, supongo.
 Y creo que me he vuelto a intoxicar de esperanza. Apenas puedo estar una hora sin creer que has llamado a la puerta. Escucho el timbre cuando suena el silencio. A veces es el cartero, pero no trae ninguna carta tuya, sólo notificaciones de embargo. 
Que se lo lleven todo. Que se lo lleven todo, y que vuelvas tú. 
Pero vuelve pronto, antes de que también se lleve septiembre, las pocas ganas que tengo de dormir sola por las noches.

that home.

Sé que existe la magia cuando apagas la luz y subes el volumen de la música.
 “That Home” de The Cinematic Orchestra invade la habitación. Y no puedo evitar llorar. Lloro de felicidad.
Lloro porque hay algunos momentos que están más cargados de vida que todo lo demás. Momentos como ese. Y no sé qué hacer, qué decir, el por qué  no podríamos quedarnos allí para siempre.
Es triste y bonito, como un atardecer; como la vida, triste y bonita
Cierro los ojos, hay algo dentro de mí, un algo, y me convalezco de que todo irá bien. Sé que todo irá bien… 
Te cojo de la mano, lo necesito, a lo mejor para saber que sigues ahí y que no estoy en un sueño.
 “Nadie me creerá cuando les hable de esto”, te digo.
 “¿De qué?”, preguntas. 
Y no te respondo, creo que sabes perfectamente de qué hablo. Sonrío. Y aunque está demasiado oscuro y apenas puedo verte la cara, sé que tú también sonríes. Y nos quedamos así un rato. Un buen rato. La música continua sonando y la vida sigue, y tampoco está tan mal.

                             

martes, 20 de agosto de 2013

Hasta que no dejes de ser pequeña, no logras entenderlo.

Es tan guapa que no encuentro un adjetivo para decir cuanto la quiero.
Es tan guapa que es casi la mujer de mi vida.
Tan guapa como para no perder la sonrisa cuando nadie le decía lo ricas que estaban las lentejas.
Tan guapa como para llorar en su pecho cuando mi hermano me pegaba, o dormirme en su hombro cuando el día se me hacía largo.

Erase una vez una sonrisa llena de amor. Parece tópico para una madre, pero ella me convirtió en persona haciendo el amor hace casi 20 años.

Ahora sé cuando la abrazo, que todas las madres tienen derecho a ser felices, pero que la mía más.
Que ella dejaría de dormir por las noches para que así yo no tuviera pesadillas.

Que el bocadillo del recreo siempre llevaba más cariño que otras cosas.Que me ha regalado su sonrisa llena de luz y su pelo castaño. Que me ha enseñado a querer y a compartir, que la vida no siempre es rosa desgraciadamente, que nadie te hace favores, que con todo se puede, y que siempre hay razones para ser feliz por muy minúsculas que sean.

Que ojalá algún día pueda regalarle la vida que se merece, y el corazón que ella dividió para nosotros, para los míos.

Que gracias a ella, me suenan los latidos, y que gracias a todo lo que me ha enseñado, me laten aún más fuerte.

TE QUIERO MAMÁ.

domingo, 18 de agosto de 2013

Algo tan sencillo como hacerte reír SIEMPRE.


P.D. te quiero.










domingo, 11 de agosto de 2013

Vamos, lo normal.

Las cosas empezaron bien, nos veíamos un par de  días a la semana. Tabaco y cervezas, risas, muchas risas, maquillando el pasado para parecer más de lo que somos. Vamos, lo normal. Así unos meses, hasta que uno de los dos pidió algo más.

Ese fue el punto de ruptura para que el terreno que pisábamos empezara a desnivelarse. Vinieron entonces los pretextos,los regates, los mensajes a deshoras, las llamadas distanciadas en el tiempo  y excusas, muchas excusas.Vamos, lo normal. 


Se empezó a cumplir esa extraña teoría de que en el amor  uno quiere y el otro sedeja querer. Al final, con el corazón sin presupuesto, me cansé de perseguirte... de no encontrarte,ni siquiera de encontrar  las llaves que abrían las puertas de tu corazón.


Una buena tarde, después de unas semanas dándome excusas para no verme, me enteré de que volabas en otro colchón con otra que no era yo, y yo, que tantas veces deseé ser ella, fue entonces cuando comencé a quererte.  Vamos, lo normal.




Que razones para quererla tenemos todos.

Los principios no fueron buenos, eso todo el mundo lo sabe. Quizás la odiaba por eso, por ser tan diferentes, tan poco iguales, sin imaginar que por esa misma razón poco después la querría como a nadie.

Se sentaba a más de tres filas detrás mía, pero poco a poco fue ganando filas hacia delante como escalones en mi corazón. Quién podría odiar a esa azafata de ojos verdes que te hacía llegar a 3 metros sobre el cielo con sólo rozarte. Quién podría odiar a una cosa tan grande.

Creo que nadie ha aguantado tantas lágrimas mías como ella, a veces por idiotas sin sentido,  otras por que la idiota era yo y otras tantas que he tenido que secarle yo. 
" De to se sale" como ley madre entre las dos.

Ahora somos algo más madura, y ya no grabamos vídeos de como inflar condones, ni bailamos canciones a lo "spice girl". Hemos crecido en todos los sentidos, como también ha crecido " nuestra amistad" como han decidido llamarlo algunos y que yo me empeño en no darle nombre, porque algo tan grande no puede llamarse de una forma tan simple y sencilla como esa.

Y es que hay veces que puede llegar a sacarme de quicio, y otras en la que le toca a ella odiarme a mí, puede que no seamos perfectas, que nos gritemos más de lo que nos decimos te quiero, pero en el fondo sabemos que no hay una sin la otra, o al menos, así pienso yo. 

Porque razones para quererla tenemos todos, pero os aseguro que yo muchas más que vosotros.

                               

sábado, 10 de agosto de 2013

Pequeña de las dudas infinitas.


Que como yo a veces sueño nadie ha soñado  contigo.







Que como te echo de menos no hay en el mundo un castigo.

Sueño de una noche de verano.

Ya lo dijo Shakespeare, " el amor no mira con los ojos, sino con el alma". 
El amor nos invisible a todo, es algo que se siente como si de una ola de fuego se tratase que tema por dentro lentamente. Te hace sentir especial, tal vez raro, distinto... el amor cuando se tiene, cuando es correspondido, te hace la persona más grande y maravillosa de este mundo.

Yo a veces me siento grande por alguien, o mejor dicho,me siento grande por ti. Pero sólo es un sueño de una noche de verano, y caigo en la cuenta de que te perdí. Abro los ojos y me hago a la idea de que ahora ya eres pasado, de que hace meses que dejé de sentirme grande en tus brazos.

Ya lo dijiste , "a veces el amor da vida,a veces el amor mata lentamente". 
A mí me ha tocado la segunda parte, y mientras tú te sientes grande en brazos equivocados, yo, aquí, me siento pequeña sin ti.


FEBRERO.

..Y un día cansada de bares y besos sin nombres, de amantes de temporada y caricias con prisa, dejando de lado las camas rápidas y las sábanas olvidadas, empezaba nuestra historia, una de esas historias sin contranto.

Nos besábamos lento para no tropezar, sabía que caminando despacio, también llegaría lejos.
Era un amor precipitado, un principio improvisado, como quien improvisa un verano en FEBRERO.

jueves, 8 de agosto de 2013

HAZME VOLAR.




Sin que eso me importarse.

 

"Cómo no pude darme cuenta
que hay ascensores prohibidos,
que hay pecados compartidos,
y que tú estabas tan cerca.
"

Te buscaría sin pensarmelo dos veces.


Estoy buscando la manera de explicarte que te espero. Que no sé como decirle a mis manos que ya no le tocan acariciarte este próximo invierno. Estoy buscando la manera de explicarte que te quiero, o que todavía no puedo quererte, porque ahora, cuando abro los ojos, dejas de ser sueño y te conviertes en un hueco vacío. Que tengo mi cama llena de noches pendientes contigo, que sólo tú puedes pedirme que deje de destruirme por las noches dándoles caladas a un cigarro como si de tus besos se tratasen. Que sólo busco la manera de explicarte, que el amor ha encontrado a todos, a todos menos a mí, que nadie sabe darme tus besos y que yo no soy nada sin ti. Tal vez cada día sea más consciente de que hay cosas que no se tocan por miedo a que se rompan. Como tú rompistes mis planes... como yo quería romper el cabecero de tu cama. Como se me cae el mundo cuando tú me faltas, como cuando se me caía el alma cuando me susurrabas "quiero más". Ahora mezclo cervezas con planes fatales, sigo buscando razones para olvidarte en mi lista de contactos. Que sólo busco la manera de explicarte que te espero. Que no sé como decirle a mis manos que se tienen que aguantar las ganas de no morir en el intento de tocarte. Que Sabina dice que el amor cuando no muere mata, y la verdad es que no creo que me quede mucha vida más. Pero no, no quiero hablar de ti, aunque siempre hable de aquello que me falta.